La pandemia de COVID-19 ha puesto de manifiesto varias vulnerabilidades, así como oportunidades, para la cadena de suministro australiana. Mientras que el Tesorero Federal Josh Frydenberg ha prometido una reevaluación de las cadenas de suministro y un enfoque en la fabricación de nichos en un mundo post-COVID-19, muchos fabricantes han centrado su atención inmediata en hacer frente a la escasez de artículos como ventiladores, máscaras y desinfectantes para las manos. De hecho, con el fin de ayudar en la lucha nacional contra el COVID-19, el Primer Ministro, Scott Morrison, ha instado a los fabricantes australianos a hacer un cambio de guerra en su producción.
La expresión «fabricación en tiempos de guerra» se acuñó durante la Segunda Guerra Mundial, cuando Estados Unidos y Gran Bretaña reconvirtieron sus líneas de producción para fabricar barcos, tanques, bombarderos y otros equipos militares. En algunos casos, incluso se fabricaron medias para que sirvieran de paracaídas.
He aquí algunas de las ingeniosas formas en que los fabricantes australianos han cambiado sus líneas de producción:
- Las fábricas se pasan al desinfectante de manos
Siguiendo el ejemplo del conglomerado francés LVMH, que gestiona marcas de lujo como Louis Vuitton y Dior, que ha transformado sus fábricas de perfumes en fábricas de desinfectantes de manos, muchas empresas australianas han cambiado sus líneas de producción.
Una de las mayores empresas de envasado de Australia, Pact Group, está reconvirtiendo las líneas de producción de tres de sus plantas de Sydney para empezar a fabricar por primera vez desinfectante de manos, en lugar de limpiadores industriales. La empresa espera estar a pleno rendimiento a mediados de abril y fabricará unos dos millones de unidades de desinfectante de manos al mes, de las que prevé que alrededor del 95% del nuevo producto se venderá en Australia.
- Impulsar el suministro de ventiladores
HP y Smile Direct Club están trabajando en la impresión 3D de piezas como válvulas de ventilador y filtros respiratorios. HP pondrá a disposición sus archivos de diseño patentados para estas piezas, de modo que puedan fabricarse en cualquier parte del mundo, y también está ayudando a los clientes a salvar posibles interrupciones de la cadena de suministro ampliando las capacidades de impresión distribuida bajo demanda a cualquiera que lo necesite. Y Dyson ha diseñado y fabricado un ventilador totalmente nuevo, el CoVent, en sólo diez días, y ya ha recibido un pedido del gobierno británico de 10.000 unidades, que empezarán a producirse en abril.
- Apoyo a la cadena nacional de suministro de emergencia
Mantener las cadenas de suministro es crucial para responder eficazmente a crisis humanitarias como la del coronavirus. Los supermercados australianos se están hundiendo bajo la presión de una demanda sin precedentes y las compras de pánico de comestibles, papel higiénico, productos de limpieza y medicamentos por parte de los australianos. Esto ha dado lugar a llamamientos a la calma por parte de los políticos y a garantías por parte de los líderes de nuestros principales supermercados.
Las empresas australianas de fabricación y distribución han respondido ampliando sus recursos en medio de una reducción de la demanda de sus propios productos, como vino, licores, carne y marisco que se exportan en masa a China, y muchas han ofrecido sus flotas de camiones y conductores para reasignarlas en apoyo de la contingencia de la cadena de suministro nacional.
- Agilidad de fabricación y distribución
La agilidad en la fabricación y la distribución es la capacidad de responder rápidamente a cambios impredecibles en la demanda. Ahora mismo, también es un requisito para la supervivencia diaria de los más fuertes en nuestra industria. Creará una organización más ágil, capaz de adaptarse con rapidez, al tiempo que aumentará el potencial de colaboración con otras empresas que también participan en la cadena de suministro en tiempos de guerra.
Las aplicaciones de planificación de recursos empresariales (ERP) podrán ayudar a los pequeños y medianos fabricantes de Australia a responder con una agilidad sin precedentes a esta emergencia. Salvo contadas excepciones, los fabricantes que sobrevivan a esta crisis serán los que hayan sido capaces de cambiar de dirección en un momento. Las organizaciones que dispongan de una aplicación ERP sólida tendrán una mejor visibilidad, una mejor programación y permitirán la automatización y personalización de los nuevos productos que se necesiten.
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